Con demasiada frecuencia subestimamos el poder de un toque, una sonrisa, una palabra amable, un oído atento, un logro honesto o el acto más pequeño de cariño, todos los cuales tienen el potencial de cambiar una vida.

Tú tienes el poder de cambiar una vida, como enfermera/o, tienes la oportunidad de sanar la mente, el alma, el corazón y el cuerpo de tus pacientes, sus familias y nosotros mismos, en el camino puede que olviden tu nombre, pero nunca olvidarán cómo los hiciste sentir.

Tu vocación –la enfermería– es el arte de amar y la ciencia de cuidar, si fuera fácil todo el mundo lo haría, pero eres tú que te esfuerzas, te le levantas cada mañana (o noche) para cubrir tus jornadas de hasta 14 y más horas seguidas sin dormir y solo con un café en tu sistema, pero con ganas de hacer del mundo un lugar mejor.

Eres clave en el cuidado de la salud de todo el mundo, te admiramos, respetamos y apoyamos, sabemos que no es fácil ser un profesional de la salud, los errores, momentos de ansiedad, logros y largas horas de estudio son lo que te hicieron el increíble profesional de la enfermería que eres hoy.

With love, Kanaus

¡Feliz día de la enfermería! a todos los héroes que con pequeñas acciones y gran amor cambian al mundo.